La Vitamina C es una vitamina hidrosoluble, esencial para el organismo, es decir, no es posible ser sintetizada por nuestro cuerpo y debe ser obtenida a partir de los alimentos. Se encuentra distribuida en la naturaleza, principalmente en los frutos cítricos.
Los complementos de vitamina C se utilizan cuando la disponibilidad de ella en la dieta es insuficiente o cuando los requerimientos están aumentados (infecciones, escorbuto, convalecencia, fumadores, etc.), posee una poderosa acción antioxidante, ayudando a proteger las células contra los daños causados por los radicales libres.
Además, el cuerpo necesita Vitamina C para producir colágeno, una proteína necesaria para la cicatrización de las heridas. La Vitamina C también mejora la absorción del hierro presente en los alimentos de origen vegetal y contribuye al buen funcionamiento del sistema inmunitario.
Observaciones: Complemento alimentario, su uso no es recomendable para consumo por menores de 8 años, embarazadas y nodrizas, salvo indicación profesional competente y no reemplaza a una alimentación balanceada. Mantener en su envase original, protegido de la humedad y de la luz a no más de 25°C.
Mantener fuera del alcance de los niños.
Modo de uso: Disolver 1 tableta en 250 ml de agua. Consumir máximo 1 tableta al día.